El Consejero de Asuntos Sociales Vasco da lecciones de hipocresía

Los últimos casos de violaciones en grupo cometidas por inmigrantes marroquíes menores de edad tutelados por el Estado en Euskadi han puesto de relieve la peligrosidad de criar cuervos. Ha trascendido que la Diputación Foral de Guipúzkoa solicitó en abril la deportación de los criminales que recientemente cometieron las violaciones, y ante la alarma social que estas barbaridades han provocado, la misma Diputación ha solicitado a los jueces que aceleren las causas pendientes con delincuentes inmigrantes menores de edad. Y es que esos bastardos contaban ya, antes de cometer las violaciones, con un amplio historial delictivo.

José Ignacio Insausti, Director de Infancia y Juventud de la Diputación Foral de Guipúzkoa, declaraba al respecto que no entiende «cómo esos chavales que cometieron las agresiones en Donostia ni siquiera han ido a comparecer ante el juez y los seguimos acogiendo». Incluso un diputado socialista ha tenido el coraje de romper la disciplina de partido, de tolerancia absoluta con la criminalidad, sobretodo si es extranjera, y ha pedido sin tapujos que de deporte a los inmigrantes criminales que cometan violaciones y abusos sexuales, por muy menores de edad que sean.

A todo esto, se le ha añadido la publicación del barómetro anual realizado por el Observatorio Vasco de Inmigración Ikuspegi, que pone de manifiesto que el 78,9% de los vascos considera que hay demasiados inmigrantes.

Ante esta conflictividad, al Consejero de Asuntos Sociales Vasco no se le ha ocurrido nada más que soltar un sermón progre y lleno de estupideces, que lo hacen indigno de un cargo público. Declara que en estos casos de violaciones hay «hipocresía» porque se pone por encima la nacionalidad de los criminales. Debe de ser la misma hipocresía que cuando se pone por encima la nacionalidad de las víctimas, cada vez que una ecuatoriana recibe dos tortas. Además, ha cargado contra el PSOE por apoyar la Directiva del Retorno, que él califica «de la vergüenza», y se ha referido a la inmigración como un fenómeno que está siendo asimilado “con mucha normalidad” y se está produciendo una convivencia “pacífica” desde el “respeto mutuo”. Para darse cuenta de las mentiras del Consejero, sólo hace falta entrar en el Servicio de Prensa de la Ertzaintza y observar las iniciales de los delincuentes que detiene la policía autonómica vasca. Por presiones del Defensor del Pueblo Vasco, los comunicados policiales no incluyen la nacionalidad de los detenidos, pero sin embargo puede advertirse que son extranjeros cuando sus nombres sólo incluyen dos iniciales, la del nombre y la del apellido. Aun con este procedimiento se advierte enseguida que la mayoría de los detenidos son inmigrantes. He aquí la «normalidad», la «convivencia pacífica» y el «respeto mútuo» de este embustero.

No en vano, Euskadi es la principal sede de SOS Racismo, lobby profusamente subvencionado con el dinero de todos para victimizar al inmigrante, disimular sus fechorías, y acusar constantemente al pueblo español de racista cuando éste se defiende de tanta agresión extranjera.

Enlaces de prensa
Violaciones

Caso Abierto
Últimos logros de la multiculturalidad

2 Responses to El Consejero de Asuntos Sociales Vasco da lecciones de hipocresía

  1. YM dice:

    Bien dicho.Sigue así.

  2. Inquisidor dice:

    OWNED al Consejero de Asuntos Sociales Vasco.

Deja un comentario